Como adaptar un capazo blando a un carrito gemelar

La elección del carrito gemelar

Creo que la elección del carrito para mis princesas fue una de las cosas que más vueltas a la cabeza me hizo dar antes de su compra. He decidido que este sea mi primer post (después del de presentación, claro) porque es una de las cosas que más  me preguntan por la calle cuando voy con mis pequeñas y es que considero que es una de las comprar más importantes que se hacen para el bebe antes de nacer.

Antes de decidirme, miré miles de opiniones en internet sobre seguridad, comodidad para los bebes, desde cuando se podían usar, el espacio que ocupa plegado, el peso y las dimensiones, los complementos para el cochecito…¡¡y doy gracias a que existe internet!! Porque en las tiendas especializadas, los productos específicos para mellizos son escasos (en las tiendas a las que yo he ido no solía haber más de tres carritos en exposición) y para que me los enseñaran por catálogo, prefería mirar por internet y leer las opiniones de los usuarios, que ya sabéis que siempre me ayuda.

Al final me decidí por una sillita gemelar de la marca Cosatto, principalmente por la seguridad, las medidas (tengo que plegarlo un poquito para entrar en el ascensor, pero era de los pocos que me entraba por la puerta de casa) y por lo completo que me parecía, además de económico, porque algunos carros son carísimos.

Lo compré por internet en http://www.bebesvictoria.com, porque era el modelo de la foto el que quería y era un diseño de 2012 y ya en las tiendas sólo me podían conseguir los modelos nuevos de 2013.

Este carrito según indica el fabricante se puede usar desde los 0 meses, pero a mí me daba la sensación de que mis dos princesas que nacieron pequeñitas (al final pesaron 2, 300 Kg de media cada una) no iban a ir muy cómodas en las sillas desde su nacimiento así que me plantee el incorporar un capazo blando a las sillitas para los primeros meses.

¡¡Y aquí empezaron los problemas!!

En las tiendas especializadas no me decían como eran los capazos blandos (si lo quería ver, lo tenía que comprar) no me aseguraban si los iba a poder agarrar al carrito (ya que al comprarlo de marcas diferentes no se comprometen a que sirvan los anclajes) y es por este motivo por el que me he decidido a escribir esta entrada, para que todas aquellas personas que se encuentren en mi misma situación conozcan mi experiencia.

Compré dos capazos blando de la marca Asalvo en marrón chocolate (80 € cada uno) y ¡¡sirven a la perfección!! Os enseño en unas fotos como quedan y como son los anclajes:

Realmente no serían necesarios los anclajes que ahora os voy a mostrar porque el capazo es un poquito más ancho que la sillita por lo que entra justito y no se caería, pero yo siempre le agarro las cogidas porque al bajar y subir las cuestas me tranquiliza más saber que lleva las cogidas.

Estas cogida viene en los dos laterales del capazo por lo que se puede agarrar a la pata lateral del coche y a la pata central. Trae dos broches por si la pata del carro fuese más ancha, pero al ser una sillita yo siempre lo pongo en el primero.

Este anclaje es para la parte de atrás del carrito y como es extensible, se ajusta perfectamente al respaldo de cada sillita.

De esto último no me di cuenta hasta que no tuve en casa los capazos. Aunque por dentro viene acolchado, la parte donde va apoyado el bebe me parecía un poco dura y además ¿Cada vez que el bebe regurgitara un poquito de leche iba a tener que estar desmontando el capazo y lavándolo? No me parecía práctico. Así que mi madre, que es la manitas de la familia, tomo las medidas interiores del capazo, hizo un colchoncito con goma espuma y me hizo unas sabanitas para forrar el colchón y una sabana para encima para cubrir al bebe (ya que de otra forma no puedes sujetar la sábana). Así cuando se ensucia, sólo tengo que quitar la sábana y a la lavadora y el capazo está siempre intacto.

Y si os estáis preguntando hasta cuando los han usado, os diré que hasta los tres meses. Van muy calentitas, las protege del viento y van muy cómodas porque se duermen en todos los paseítos. Además, el capazo viene con dos asas para transportarlo, lo que nos viene genial cuando vamos a visitar a los abuelos o amigos porque podemos llevar a las peques a la habitación que queramos (el carrito no entra en todas las habitaciones).

Pues creo que esto es todo. Siento que la entrada sea tan larga pero quería explicar, lo mejor que he sabido, como son los capazos blandos adaptados a la silla gemelar.

Si tenéis alguna pregunta o no entendéis algo, no dudéis en escribirme y trataré de ayudaros en lo que pueda.